Encontrarnos con nuestro mat de yoga, instalarnos en el espacio de nuestra práctica, conectar con nuestra respiración y observar a nuestros pensamientos son desafíos qué afrontamos en cada sesión de yoga. Este mes además intentamos conjugar la idea de que nuestra practica puede transformarnos.
Sin pretender cambiar lo que somos ni quién somos, el propósito de este mes nos recuerda aquello que hemos olvidado: nuestra respiración, nuestra paz, nuestra calma, nuestro silencio, nuestra vuelta a casa, nuestra libertad para elegir, nuestra capacidad de movimiento.
Transformarnos es quitar capas, es respirar profundo y encontrarnos con una nueva versión de nosotros mismos, mas verdadera, mas presente, mas libre.
Todo lo que necesitamos esta dentro nuestro, esperando que lo conectemos y saquemos a la luz.
Para sostener nuestro proceso de transformación y crecimiento tenemos que reconocer nuestras raíces, no solo nuestro lugar de origen, familia, tierra, sino también poder enraizarnos en el aquí y el ahora, reconociendo el lugar y la situación en la que nos encontramos. Solo quien se enraíza puede transformarse sin quebrarse.
Transformarse también es decidir cómo queremos caminar el mundo; elegir cada nuevo paso, dejando atrás aquello que ya no somos, que no nos identifica, y caminar el mundo a nuestro propio ritmo.
Te invito a que en este mes de junio puedas detenerte y pensar; quizás hasta puedas preguntarte si estas caminando como realmente deseas caminar, si tus pasos están inspirados por tu propósito y proyectos. Transitando el sexto mes del año podemos hacer una pausa y re-formularnos cómo queremos seguir caminando en el próximo semestre.
Te animas ?
El yoga es un espacio en donde lo físico se vuelve emocional, donde la mente se suaviza, donde el alma encuentra lugar para expresarse.
Te deseo un hermoso mes de transformación.
Con todo mi cariño
Pía
